club del insomnio

mañana me voy a arrepentir de no estar durmiendo y de haber escrito algo que no cambia mi vida en lo absoluto. por lo pronto, me conformo con recordarme que hubo cosas peores alguna vez.

"hoy falté al colegio porque tenía prueba de matemáticas. ni ahí con sacarme un rojo tan gratuitamente. aunque es probable que me lo saque de todos modos, pero tenía ganas de que no fuese hoy". Jun. 28th 2006.

también me acordé que hay cosas que nunca cambian.

jump

me he dado varias vueltas fingiendo que aún estoy dormida y no pasa nada. para hoy he planeado ir al dentista y estudiar, aunque no me acuerdo de cómo se hacía esto último. me pregunto si soy la única persona en el mundo con la capacidad especial de inventarme problemas y cosas difíciles en las que pensar.

no sé ser más simple y resignarme a todo lo que no me gusta hacer. ojalá mi pie tuviera un nombre escrito abajo, como en toy story y así no tener nunca algo más que dudar sobre eso. y sobre nada, en realidad

frágil

no estoy ni ahí con periodismo. no quiero viajar nunca más. no quiero volver a pisar la u, ni tener que bancarme una clase latera. no quiero que nadie me diga nada por faltar a clases, ni tener que hacer trabajos sobre cosas que no me interesan. no quiero volver a poner mi reloj a las 5.20 . no quiero despertarme otro día y caminar como un zombie triste hacia la ducha imaginando cómo sería tener un día lindo, sin clases, sin buses, sin lata. me gustaría tener una noche sin poder dormir de ansiedad porque me espera un día lleno de cosas tan bacanes que ni siquiera me molestará despertarme temprano. me gustaría no haber elegido tan mal y no pensar estas cosas tan a menudo.

no puedo convivir en paz con una rutina tan muerta.

*

no sé en qué momento dejé que pasaran cosas tan extrañas. ahora sé que tengo una enfermedad que consiste en querer absolutamente todo lo que no puedo y no voy a tener porque es la única forma de ganar permiso para soñar todos los días cuando voy en el bus a la u, de regreso, mientras espero la micro, en los 15 minutos después de que se acabó la once y en todo ese rato que me demoro en quedarme dormida. sonrío mientras lo pienso y después me enojo conmigo por ser tan tonta y juro que esta es una de esas cosas que nunca le voy a contar a nadie, porque creo que ya me excedí un poco en mis afán por enamorarme de circunstancias imposibles.

pucha.

bipolar

otra vez días buenos, personas nuevas, conversaciones raras y nuevas canciones. un llamado telefónico de una persona que no oía hace tiempo me hace feliz y tengo ganas de andar en bici y hasta de cocinar, como siempre que estoy contenta. no me importa que no hayan feriados pronto o que mi cumpleaños se haya acabado o que no puedo faltar más a clases. veo a mi papá limpiando la estufa y pienso en los días helados que al fin vienen, llenos de fotos y cigarros.

y me siento muy contenta.

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me da pena. y siento pena de mí, teniendo pena.
y entonces me da más pena.

*

cuando una película es tan larga creo que en cualquier momento se va a terminar. cualquier escena es parecida a un final. cuando una película tan larga termina ni siquiera me doy cuenta. de hecho, no me importa.

he visto muchas