fac

no puedo dormir en la noche, ni concentrarme en las cosas que debería, ni dejar de pensar en una misma cosa y desde ahí hacer conexiones terribles a otras cosas más terribles. mal.
la verdad es que no me interesaba cagarla de nuevo, cometer el mismo error y meter tanto ruido. no quería que nadie supiera lo muy idiota que puedo llegar a ser, aunque muchos ya lo sospecharan. me había retirado de la vida rara hace un rato, y entonces, ¿por qué? MAL. mal, mal, mal.

la flexibilidad
de la vida
adolescente
(especialmente en individuos ridículos).

el mini-vecino

hoy el mini-vecino y yo nos saludamos por la ventana.

no nos conocemos. parece que eran como las 4 pm. me asomé porque sí y me encontré con él casi colgado, con su pequeña cabecita apenas ubicada un poco más arriba de donde termina el vidrio. le dije hola unas cien veces. ¡ooooola, oooola! me dijo ¡oolá! con su manito gordita, un poco complicado por lo cortito de su cuerpo y lo apretado de su chalequito de lana. llamé a mi mamá para que lo viera y nos seguimos saludando, creo que fue harto rato. oooola, liiiindo. (...) le dije chau y me escondí tras la cortina y así unas tres veces más. eso le causó mucha risa y a mí también, pero después me despedí de verdad y no volví a aparecer hasta un rato, cuando su ventana ya estaba cerrada.

fue el momento más feliz del día, de la semana, quizás hasta del mes.
lejos.

tenía que escribirlo para que no se me olvide.

septiembre

si tomara mis decisiones obedeciendo los últimos pensamientos antes de dormir, no me equivocaría tanto. en verdad, no sé por qué trato de hacer las cosas bien. total, sólo tengo 20.

secreto

mientras espero a tener sueño, pienso en lo que tengo que contar. no sé por qué, pero no me hace bien no contarlo. quizás cuando lo cuente a nadie le va a importar. quizás va a dejar de ser importante. quizás es una mentira que me conté a mí misma para escapar un rato. no sé.

mañana voy a tener tanto sueño. hasta mañana, secreto.

estriste

the easiest way to sleep at night is to
carry on believing that i don’t exist
the easiest way to sell your soul is to
carry on believing that we don’t exist


y eso. it's over.

there there

cada vez podemos estar más lejos. me voy acostumbrando. tenemos nuevos problemas, nuevas canciones, nuevas ideas. las noches de sábado, las mañanas de domingo, los desayunos, los planes, esconderse y ahora, la nada. como si, en realidad, hubiera sucedido alguna noche, en mis sueños, cuando era más chica. no sé qué cosas quiero ahora, no estoy dispuesta a jugar con nadie, ya no creo en muchas cosas. no quiero responder cien veces más, durante quizás cuantos años, lo mismo cuando me preguntan qué me pasa.