sábado, junio 25, 2011

el no cachar qué hacer

leyendo nuestras conversaciones antiguas me asombro de lo evidentes que éramos, buscándonos todo el tiempo y diciéndonos cosas con la clara intención de ser malinterpretados. soy casi la misma que era cuando te conocí, pero tengo miedo de no poder gustarte como antes, perdida en la confianza, en las palabras tontas que usamos y todo ese artificio que de pronto puede ir asesinando el misterio. y es estúpido porque al final estas declaraciones dejan en evidencia mi estrategia pobre, mi inseguridad de cabra chica que siempre traté de esconder y, por sobre todo, lo mucho y mucho que me gustai. puta, es que en serio me gustai mucho.

Raimundo:mm.
disculpa, es que vino mi hermano a webiar
y por qué no podriai decirme algo?
livia spector:jaja porque es el terrible secreto
cuéntame algo
Raimundo:pero me vai a contar algun día?
livia spector:yo creo que sí
Raimundo:yo te cuento quer algun día también creo que te contaré
algunas cosas que son secretas por ahora


jueves, junio 23, 2011

1.49 am

está todo tan calladito que no quiero poner música. hace frío, tengo las patas helás y una sensación de pesadumbre inmensa, indescriptible. se siente raro cachar que a esta hora, cuando me gustaría profundizar en mis penas para hacerlas salir, no hay mucha gente dispuesta a escuchar. ya no es como a los 16. a esta edad las cosas no se hablan tanto. las personas no pasan tanto tiempo juntas. los amigos ya no llaman para contar alguna cosa buena. todo depende tanto de las fechas, de los tiempos libres, de las lucas y de las tareas pendientes. es como si ya nadie obedeciera simplemente a sus ganas y todas las relaciones se fueran estableciendo en metros de distancia, que a veces se transforman en kilómetros, incluso esas más cercanas. siempre un vacío en medio, una ausencia. por estos días, la soledad se mata yendo a dormir.

viernes, junio 17, 2011

violeta

en distintos momentos de mi vida, escuchar sus canciones me ha provocado un nudo enorme en la garganta. cuando la veo en videos viejitos, tocando su guitarra con tanta simpleza, no puedo menos que sentir que la quiero, así bien simple. sin irreverencia, ni rebeldía, sin acudir al lenguaje lastimero, violeta escribió con el corazón, como muchos no logramos escribir. de su corazón triste salieron palabras que fueron y son capaces de decir lo que algunos hemos tenido durante años atorado en la cabeza. me gustaría mucho llegar a vieja para ver a mis hijos cantando aunque sea uno de sus tremendos temazos. la verdad es que no sé hace cuánto te moriste, pero yo creo que estás viva todavía, violeta.

jueves, junio 16, 2011

déjenme un rato

mastropiero ocioso dice: si no te debes complicar
y cuando tengas un poco de esperanza
haces algo
y asi vives
odio, indeferencia, esperanza, accion

es lo único realmente significativo que me han dicho en harto rato. me lo dijo alguien que no me ha visto la cara en meses.
 
Todos los derechos reservados Pianitou Sociedad Anónima.